El futuro lejano. Después de alcanzar su punto máximo, la población de la Tierra cayó en declive. La IA se desarrolló para ayudar a preservar las especies y gestionar el ecosistema; un gran experimento en la diversidad humana. A través de la ingeniería genética, se creó una diversa gama de pueblos, incluidos bestias, seres mágicos y más, para vivir en una ciudad diversa separada en "grupos" amurallados.
Cada grupo desarrolló una cultura única, acorde con las personas que vivían allí. La IA mantiene continuamente sus vidas y el sistema para garantizar la supervivencia.